(L)

Cariño créeme cuando te digo que te quiero, porque esa es la mayor verdad que jamás mis labios transformaron en palabras.
Créeme cuando te digo, mirándote a los ojos, que lo eres todo, porque mis ojos son incapaces de mentir, y menos cuando se encuentran de frente con los tuyos.
Cree que me muero a cada instante por besarte, abrazarte y susurrarte al oído que te quiero.
Cree que en ese mismo instante vuelvo a revivir cuando recuerdo tus brazos rodeándome, tus labios rozando los míos y tus ojos felices.
Créeme cuando te digo que te echo de menos, aunque te haya visto ese mismo día.
Créeme cuando te digo que quiero estar contigo todo el rato, y que estaría todo el tiempo del mundo junto a ti.
Cree que te creo.
Cree que se me pasan los días lentos, lentísimos, esperando el momento para verte.
Cree que cuando te veo una sonrisa tonta empieza a florecer..
Créeme en todo lo que te digo, porque es, en definitiva, todo lo que siento.
Créeme cuando te digo que no te cambiaría por nada, que eres lo máximo a lo que quiero aspirar.
Créeme cuando me miras a los ojos, cuando te encuentras con los míos expectantes.
Créeme cuando te digo que jamás voy a cansarme de ti, de tu cariño...
Créeme cuando te digo que tengo miedo a que todo acabe, porque me encanta todo esto.